suspiro los alientos de mujeres y hombres me gimen mario
arqueados bajo o sobre sábanas mojadas con los sexos
intercambiados con mi piel por detrás sin rostro
o delante cerrando los ojos escribo sin lágrimas con la lluvia
por el silencio de esta habitación nueva o vieja
entre la humanidad humareda aspirada desde hace años
unos labios borrados del registro de gestos dicen fue hermoso
el camino piedra la fuente agotada el cielo naufragado